«Queremos cambiar la mentalidad de los ciudadanos y que vean la bicicleta no sólo como una actividad deportiva, sino, sobre todo, como un medio de transporte. No hace falta vestirse como un ciclista para montar en bici». Este es el objetivo que se ha marcado la empresa asturiana Mov-e dentro del proyecto 'Bike to Work', una iniciativa que plantea generalizar la bicicleta eléctrica como un medio de transporte barato y ecológico al trabajo. Para demostrar las bondades de este vehículo, Mov-e celebró ayer en el Parque Tecnológico una experiencia práctica denominada 'Road Show' en la que quince personas utilizaron estas bicicletas para recorrer dos rutas.
A diferencia de las bicicletas convencionales, las desarrolladas por la empresa asturiana permiten un mínimo esfuerzo por parte del ciclista, gracias a la incorporación de un motor eléctrico, un sensor y un mando que regulan la fuerza que debe administrar la persona a los pedales para mover la bicicleta. «Es una nueva sensación. Te sientes mucho más ligero, porque apenas haces esfuerzo gracias a la ayuda del motor. Además, te permite hacer recorridos más largos y con perfiles más escarpados, debido a que el pedaleo es más suave», explica Sergio Riva, de Mov-e. Estas características se ajustan especialmente a las necesidades de los trabajadores, pues pueden desplazarse por la ciudad de una manera barata, ecológica y rápida, sin temor a sudar, razón esgrimida por muchas personas para desechar la opción de desplazarse en una bicicleta convencional.
En función del modelo, estos vehículos eléctricos tienen una autonomía de entre 40 y 100 kilómetros. Además, al necesitar poca energía eléctrica -unos 250 vatios-, se pueden recargar en cualquier enchufe en un tiempo máximo de tres horas, si bien en una hora se alcanza el 80% de la batería.
Empresas y ayuntamientos
El proyecto 'Bike to Work' ('bicicleta para trabajar' en inglés) está dirigido especialmente a empresas y ayuntamientos. Por ello, aparte de suministrar los vehículos, candados y aparcamientos para las bicicletas, Mov-e también ofrece una serie de servicios que van desde el diseño de rutas seguras hasta la formación en seguridad vial pasando por un acompañamiento en los primeros recorridos de los trabajadores. «Se trata de desarrollar una cultura y un hábito de cara a utilizar medios alternativos para acudir al trabajo», incide Sergio Riva.
De momento, quince empresas del Principado -cuatro de ellas, instaladas en el Parque Tecnológico- ya se han interesado en este proyecto, que se pondrá en marcha de forma definitiva en marzo. En este sentido, Mov-e todavía ofrece la posibilidad de unirse a 'Bike to Work' antes de que termine febrero.