por Alfonso Sanz Alduán Experto en movilidad sostenible Consultor del Grupo de estudios y alternativas 21 (gea21) (538.10 kB) Ideonidad de la marcha a pie y la bicicleta para afrontar los retos de la movilidad Fig.1: Aportaciones de viandantes y ciclistas a la sostenibilidad. Debería ser ya innecesario iniciar un artículo sobre movilidad urbana justificando por qué se habla de viandantes y bicicletas, y cuáles son sus aportaciones en la ciudad; un discurso que nadie echa en falta si se trata del automóvil o del transporte colectivo. Tener que mostrar a estas alturas las ventajas del ciclismo y la marcha a pie para la ciudad, sus habitantes o el planeta es una muestra de que la nueva cultura de la movilidad, en la que dichos modos son el pilar fundamental, está aquí todavía en pañales. Hagámoslo por penúltima vez. En los últimos tiempos, varios de los argumentos que tradicionalmente se habían esgrimido para señalar la importancia de reconsiderar el papel del peatón y de la bicicleta en la movilidad urbana se han reforzado con nuevos datos y retos. En particular, cabe recordar la actualidad de los siguientes vectores: |